Hermanos, hoy traemos a ustedes, esta bella plegaria a nuestro amado Dios, para darle gracias por todas sus bendiciones, por todas las cosas que nos da y para que en su infinita misericordia, nos siga dando todo su amor.
Te invitamos a realizar esta oración todas las mañanas, o durante nueve días seguidos, si tienes alguna petición en especial, confiando en la gracia y el amor, de nuestro amado Creador.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Dios de gran misericordia, gracias por el nuevo día que me das, porque tu compasión se renueva cada mañana. Estoy profundamente agradecido por la vida que me has dado y por el privilegio de poder estar ante ti con gran confianza, postrándome ante tus pies en adoración y amor.
¡Grandiosa es tu fidelidad y tu firme amor, oh Señor, gracias! No sé qué va a pasar hoy, y cuánto voy a poder hacer, pero tú sí, así que te entrego mi día, para que lo colmes de tus grandes bendiciones, cúbrelo con tu manto protector Señor y lléname con tu Espíritu Santo.
Te amo por todo lo que has hecho, y por eso hoy vengo ante ti a darte gracias por esas bendiciones, de las cuales tú has dicho en tu palabra, que son hermosas promesas para tus hijos. Jesús le dijo a aquella mujer que buscaba sanidad para su hija, que los milagros son el pan reservado para los hijos, y yo Señor también tengo hambre y anhelo, aunque sea un pedazo de ese pan que solo tú nos das.
Tú tienes todo el poder y la autoridad que existe en el universo, y no hay nada difícil que tú no puedas hacer. Tú has dicho que todas las cosas son posibles para aquellos que creemos en ti.
Señor tú sabes que te amo y tengo mi fe puesta en ti, y tu palabra dice que Jesús fue herido por nuestras transgresiones, molido por nuestras iniquidades y que el castigo que sobrevino sobre el cuerpo de Jesús, ha sido lo que me ha dado la salud y la paz. Yo creo que Jesús ha pagado el precio completo para mi redención, mi liberación, mi prosperidad y mi sanidad, sé que su sacrificio no ha sido, ni será jamás en vano porque ciertamente por sus llagas he sido curado.
Mi Dios, me niego a creer las mentiras del enemigo, sé que no moriré, sino que viviré y mis ojos mirarán tu gloria porque tu palabra me asegura que es tu deseo librarme del mal. Tú siempre estás dispuesto a perdonar, a sanar y a prosperar a aquellos que vienen ante ti en humildad de corazón, pues tú propósito para los que te aman es de bien y no de mal, de vida y no de muerte.
Examíname Señor y revélame cualquier cosa escondida en mí que pudiera estorbar mi tranquilidad, te pido que mis emociones sean sanadas y que mi capacidad mental sea renovada, para entender, aceptar y recibir el milagro que estoy esperando.
Te pido Señor que me ayudes para que no sea yo de doble ánimo ya que tú has dicho que el hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos y no puede esperar recibir nada bueno, por eso, guíame en tu palabra y ayúdame a que mi espíritu se regocije siempre en ella, para ser siempre de un solo ánimo, que sea alegre, de un solo propósito, para mantener siempre mis ojos enfocados en ti y en tu poder, desechando pensamientos que buscan derrumbar mi fe.
Señor, tú todo lo conoces, nada está escondido para ti, tú sabes todas las causas de mis problemas y ahora clamo a ti por el siguiente milagro que de corazón te pido, y yo estaré dispuesto a obedecer tus mandamientos, para no volver a caer en trampas de iniquidad que traen sobre mi vida maldición y dolor:
(En este momento, dile al Señor tus dificultades o anhelos y pide que haga un milagro en tu vida)
Gracias, amado Creador, por el aire que cada día me permites llevar en mis pulmones. En tus manos yo dejo mi alma y con tu gracia y protección recorreré tus caminos. Te pido que me des claridad en mi mente, fortaleza en mi alma y sabiduría en mi espíritu, para que cuando tú me hables, yo pueda escuchar y obedecerte, pues quiero hacer tu Santa Voluntad.
Cubre Señor cada célula de mi cuerpo con tu sangre poderosa, te pido que cualquier herida sea sanada en el nombre de Jesús. Yo te adoro, te alabo en voz alta y te doy gracias por este milagro, por mis errores y faltas te pido perdón, pero sobre todo hoy doy gracias porque siempre estás a mi lado Dios mío.
Jesús, si me faltan fuerzas, lléname de las tuyas, si tengo dudas, fortalece mi fe, si estoy triste, lléname de consuelo, si me equivoco, guíame por el camino, si te fallo, perdóname Señor, si siento soledad, regálame un abrazo, si estoy intranquilo, llena mi espíritu de paz, si busco tu presencia, inunda mi vida con el Espíritu Santo.
Gracias mi adorado Jesús porque tu palabra se cumple y has estado aquí todos los días. Te agradecemos que nada nos ha faltado, y sobre todo porque hemos aprendido a valorar lo que sí tenemos, y a no perder nuestra paz deseando lo que no necesitamos.
Gracias mi Dios, porque tú nos guardarás en tu Santa Mano, en tu paz, y en salud. Gracias por tu perdón, el cual derramas sobre nosotros mientras nos esforzamos en mantener una actitud de comprensión y paciencia en este hogar y con todos los seres queridos que nos rodean.
Te doy gracias Señor, y confío en que muy pronto, si es tu Santa Voluntad, me concederás ese milagro que tanto estoy necesitando en mi vida, y que solo tú me puedes dar, si yo creo de todo corazón, y mi fe hoy me confirma, que sí creo, que te amo, que te acepto y que tú lo eres todo, en mi vida.
AMÉN +
Ahora consagrémonos al Señor, complementando nuestra oración con un Credo, un Padre Nuestro, un Ave María y un Gloria.
https://www.facebook.com/YocreoenDiosI
Comentarios