Amadísimos hermanos de Yo creo en Dios, que hoy nuestro Señor, proteja y bendiga a nuestros adorados hijos y nietos.
Todos sabemos del sacrificio y abnegación que debemos tener para sacar a nuestros hijos adelante, y por eso siempre queremos lo mejor para ellos, sin embargo, en su andar, están en riesgo de caer en tentación y de ser presa del enemigo.
Por esa razón hoy te traemos esta poderosa y milagrosa oración a nuestro buen Jesús, para pedirle que proteja y bendiga a nuestros hijos y a nuestros nietos, que son parte de nuestra existencia, para que salgan siempre adelante, caminen por la senda del bien y logren superar todas sus dificultades.
Te invitamos a hacer la oración cada vez que lo desees, o durante siete días seguidos si tienes alguna petición en particular, con la total certeza, de que el Señor estará a su lado, muy pronto.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Bendito y amado Dios, en este nuevo día tengo la gracia de poder saludarte y conversar contigo, como primera medida, para pedirte perdón por todos mis errores y pecados, pues sabes que soy una persona imperfecta que necesita a cada instante de ti, ya que soy frágil y sin ti, me perdería.
Te ruego que me des la fortaleza y entereza necesarias, para seguir adelante cada día, para llevar siempre mi vida por el camino del bien, para poder ser una mejor persona cada día, y para poder ser testimonio de vida para otras personas, en especial, para mis hijos y mis nietos.
Maravilloso y Eterno Jesús de Nazaret te pido de corazón, que protejas a mis hijos de todo mal y peligro, por favor envíales ángeles guardianes a su alrededor, ángeles guerreros con espadas poderosas, para que acudan a darles protección, de cualquier cosa que quiera venir en contra de ellos, de su vida o sus pertenencias, siempre, en cualquier lugar o circunstancia.
Señor de gran poder, en tus manos hoy los coloco, sabiendo que son ellas el lugar más seguro en donde pueden estar, por eso confío plenamente en que tu sombra les resguardará y tus ángeles les rodearán siempre.
También te pido mi Dios, que los guíes en todo momento por el camino correcto, el que nos has trazado para todos y que no se aparten de él jamás, para que cumplan su propósito en esta tierra. Guarda cada una de sus sendas y endereza sus pasos, no dejes que se aparten ni a derecha, ni a izquierda, guárdalos Señor de la tentación y no permitas que se alejen de tu presencia.
Amadísimo Señor, también me presento hoy ante ti, para interceder por todos y cada uno de mis nietos, esos con los que haz coronado mi cabeza con orgullo, esa extensión de los hijos que me prestaste y que hoy en día, son la alegría de mi corazón.
Te pido Señor con fervor, que tu favor no se aparte de ellos, que tu misericordia siempre les acompañe y que tu poder sobre sus vidas sea constante. Guárdalos de toda asechanza del enemigo y de los lazos de todos los enemigos que quieran levantarse en contra de ellos para hacerles mal, te ruego que no permitas que se les acerquen, que los dañen, ni siquiera con sus malos pensamientos.
Mi Dios, yo sé que tú escuchas atentamente la oración que hoy te hago, sabes que deseo lo mejor para todos ellos, pues son la luz de mis ojos y de mi corazón, y por eso confío y espero, que realmente los guardarás y los mantendrás a salvo y que nadie ni nada los arrebatará de tus manos fuertes y poderosas.
Señor Jesús, también deseo que llegues hoy a sus corazones, para que crezcan fuertes en tu palabra, que sigan tus pasos con fidelidad. Así mismo deseo que los levantes siempre de sus caídas, y que los hagas prósperos en sus caminos, así como prosperarán sus almas en tu amor y sabiduría.
Por eso te doy gracias por atender a mis ruegos y súplicas ante tu altar, te doy gracias porque tu bendición estará sobre ellos en todo momento, y con mucho fervor ahora te pido, que les concedas esto en especial, que deseo para ellos en su vida:
(En este momento exprésale al Señor lo que necesitas o deseas para tus hijos o nietos y pídele que si es para bien actúe en sus vidas y si lo deseas, escríbelo en los comentarios para fortalecer tu petición)
Muchas gracias mi adorado Señor, gracias por tu enorme sacrificio, gracias por enseñarnos tantas cosas bellas e importantes para nosotros, por permitirnos llevarnos mejor como hermanos e hijos de Dios, por darnos la esperanza de la vida eterna y por darnos la certeza de tener un Padre Celestial que habita en los cielos y que siempre está pendiente de nosotros.
Hoy la tranquilidad llega a mí, pues sé que de ahora en adelante serás tú el principal defensor de mis hijos y de mis nietos, por favor cuídalos, bendícelos y no los desampares nunca.
Señor, tú eres nuestro Dios Todopoderoso, grande en misericordia y en amor, te pido que siempre estés presente en nuestras vidas, perdones nuestras culpas, y nos permitas vivir y disfrutar de este gran paraíso que has construido para nosotros, y que al final de nuestras vidas te hagas presente, para que de tu mano, lleguemos al cielo y podamos vivir en la eternidad, en completa felicidad, al lado del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
AMÉN +
Ahora, para terminar de encomendar nuestros hijos y nietos al Señor, hagamos el Credo, un Padre Nuestro, tres Ave Marías y tres Glorias.
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