Queridos hermanos de Yo creo en Dios, gracias por acompañarnos una vez más y que nuestro Señor Jesucristo cuide de todos ustedes en esta bella noche.

Son muchas las ocasiones en las que definitivamente no podemos conciliar el sueño, pasamos noches tormentosas debido a los diferentes problemas, inconvenientes, carencias, envidias o energías negativas que otros nos envían y que inevitablemente perturban nuestra tranquilidad. 

Por ese motivo, queremos que en esta noche te encomiendes a nuestro buen Dios y Señor Jesucristo, para que puedas tener un descanso placentero, y te ayude a alejar toda intervención o pensamiento maligno o malicioso que desee entrar en tu mente para perturbarte o generar sueños incómodos, que te hagan pasar una mala noche y no te dejen descansar.

Te invitamos a hacer esta oración cada vez que quieras que el Señor cuide de ti, o durante siete días seguidos si tienes alguna necesidad en especial; como siempre con mucha fe y amor, con la esperanza y la certeza de que nuestro amado Jesús estará a nuestro lado.

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.

Señor Jesús, que estás en los cielos, que estás por encima de todo, de cualquier esfuerzo humano, de todas nuestras intuiciones, de todos nuestros deseos, por favor envuelve mis sueños con tu gracia divina, bendíceme y cuídame en esta nueva noche, para que pueda dejar todas mis angustias y contrariedades a un lado, y pueda descansar profunda y tranquilamente entre tus sagrados brazos.

Amado Jesucristo, gracias por estar cada vez que te necesito, sobre todo cuando cae la noche y mis temores se incrementan. Te pido que me protejas del maligno y de todos los entes oscuros que quieran dañarme o afectar mi tranquilidad.

A mi derecha te encuentras y a mi derecha amanecerás Señor mío, y yo a cambio, depositaré mi fe siempre en ti, porque tú mi amado, eres mi pastor, el único, y sin ti me perdería en este mundo, en cambio de tu mano, con tu guía, siempre puedo recomponer el camino, siempre puedo volver a ti y tener encendida constantemente una luz de esperanza, a pesar de que la noche sea muy oscura, a pesar de que sienta que no hay salida a mis problemas, tú estarás allí para consolarme y darme las fuerzas necesarias para seguir adelante.

Señor, contigo nada me faltará y si estás en esta noche a mi lado, mi ser se llenará de paz y de sosiego, mi cuerpo podrá reposar de manera tranquila, y mañana cuando amanezca, tendré la lucidez y energía necesarias, para poder seguir luchando por todos mis sueños, para poder cumplir con mis obligaciones y poderle dar un mejor bienestar a mi familia.

Señor, en esta noche y antes de dormir, quiero pedirte especialmente por esta situación que no he podido resolver y que me llena de angustia y no me ha dejado dormir en paz:

(En este momento dile a Jesús tu problema y pídele que te ayude a resolverlo)

Amado maestro, gracias por escuchar mi súplica, gracias porque tengo la seguridad de que muy pronto recibiré tu bendita ayuda, que me dará la lucidez y la entereza, para poder resolver esta situación que me ha llenado de desasosiego e intranquilidad.

Señor, por favor llena mi vida de amor y mi mente de positivismo, para que no lleguen a ella pensamientos de maldad, de odio, de rencor, de antipatía, de resentimiento o de envidia; por el contrario, permite que lleguen a mi cabeza, solo sentimientos nobles como el amor, la gratitud o el optimismo, para poder tener mejores relaciones con mis hermanos y no seguir hiriendo o alejando a las personas que amo y que me importan.

Jesucristo bendito, nunca quiero dudar de tu presencia, porque sé que si me alejo de ti, lamentablemente me perdería, caería en la oscuridad, en los vicios del mundo, e incluso podría encontrar la muerte, en cambio sabiendo que siempre estás conmigo, hasta en los momentos más difíciles, siempre tendré la esperanza de una mejor vida, con mucha felicidad y llena de amor.

Permite mi Señor, que en esta noche tu serenidad sea mi principal aspecto, que mi hogar esté protegido por tus ángeles, que tu poder infinito expulse lejos todo mal que me aceche, toda amenaza que se oculte entre las sombras o que se divida entre la claridad, que se desaparezca por completo, en tu nombre Señor Jesús.

Bendito Señor, te ruego porque alientes mi espíritu, le brindes energía y vitalidad a mi cuerpo, y tenga mañana una gran motivación para seguir viviendo. En esta noche, en tus brazos me acuesto Señor, y gracias a ti, todas mis angustias se irán, solo la paz y la tranquilidad estarán presentes, permitiendo que en mis sueños encuentre el sosiego y la calma, y que en estas horas junto a ti, todo mi ser se renueve para comenzar un nuevo día con gran entusiasmo.

Señor Jesús, te doy gracias por escuchar mi oración, desde este momento siento tu presencia, siento la paz, la armonía en mi lecho, y te bendigo por acompañarme en esta noche y por siempre.

AMÉN +

Ahora haz el Credo, un Padre Nuestro, tres Ave Marías y tres Glorias.