Estimados hermanos de Yo creo en Dios, que la protección del Señor, esté sobre ustedes en este nuevo día.
En ocasiones solemos sentirnos mal, sentimos que las malas energías nos invaden y lo vemos reflejado en nuestro ánimo, pues hasta la enfermedad llega a nosotros, por culpa de las envidias, o de incluso malas acciones de otras personas que quieren perjudicarnos.
Por esto hoy te traemos esta milagrosa y muy poderosa oración, que está especialmente indicada para vencer y dominar cualquier adversa situación, causada por adversarios o enemigos que quieran causarte confusión o perjuicio.
Te invitamos de esta manera, a realizar esta poderosa oración durante nueve días seguidos, y si estás muy desesperado, tres veces al día, para que te liberes de envidias, rencores, juicios, o incluso de magias o conjuros que hayan realizado contra ti, y así, poder gozar de la serenidad y de la paz que mereces, con la ayuda de nuestro Dios y Creador.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Con el poder de mi Dios y padre Celestial, con toda la fuerza del Santo Hijo, nuestro Redentor y Señor, con todo el poder del cielo, alcanzaré y venceré todos y cada uno de mis enemigos, nadie ni nada podrá alterar mi paz y progreso, nadie estropeará mi vida familiar, ni mi trabajo, ni mis posesiones, por la gracia de Dios.
Por la fuerza de la luz incandescente del Señor, por la fuerza de las aguas que Dios ha puesto en el mar, por la fuerza interna de la tierra creada por Dios, y por la fuerza arrasadora del viento que viene del cielo, dominaré y venceré a mis enemigos, y ninguno a mí me dañará, y tendré una vida plena de amor, de trabajo, de salud y prosperidad, con la ayuda de Dios.
Por la fuerza de todos los elementos creados por el Señor, y con el poder de los dulces Arcángeles y bienaventurados Santos, seré protegido de todos mis enemigos visibles o invisibles, en la tierra, en el mar, en el aire y en todo lugar; su mal proceder no llegará hasta mí o hasta mi familia, y nada podrá hacer que reciba humillación o injusticia alguna.
Con la fuerza del Padre y de todo lo que ha hecho para nosotros, mi cuerpo estará protegido, guardado y a salvo contra todos los males, enemigos, adversarios o peligros, estará amparado y defendido de malos espíritus o de los entes espirituales seductores y maléficos que quieran acecharme.
En el nombre de Dios Todopoderoso, que todo lo ve, en el nombre de la Virgen María; madre mía; en el nombre del arcángel San Miguel, mi defensor; en el nombre del arcángel San Gabriel, mi mensajero; en el nombre del arcángel San Rafael, mi sanador, en el nombre de San Jorge, valiente guerrero, venceré a mis enemigos, ellos serán dominados, sus ataques y malicias no llegaran a mí, y nada de lo que intenten contra mí les saldrá bien.
Yo con humildad y con total seguridad pido al cielo, ser librado de toda opresión y de aquello que impide mi libertad física, espiritual, amorosa o financiera; con la ayuda del Altísimo Señor, la Señora Virgen María, de todos los Arcángeles, Ángeles, Apóstoles y Santos de la Gloria, quien quiera llegar hasta mí con magia negra, salaciones, malos ojos, hechizos o brujerías, con maldiciones o conjuros, será alejado de mi presencia, quien quiera ver mi perdición será apartado de mí, y se arrepentirá ante mi Dios por su pecado.
Pido a Dios y a su corte celestial, me brinden su poderosa protección; quiero recibir su amparo para que quede cubierto y a salvo, y ruego que en los malos momentos, en los peores trances, no me falte el inestimable auxilio que me puedan dar, para que resguardado de cualquier mal físico o mental, no lleguen a mí los infortunios, los peligros y las adversidades; en sus manos confiadamente me coloco, en sus fuerzas me refugio pues sé que con sus bendiciones y cuidados, con el apoyo que brindan y sus poderes actuando a mi favor, todo lo bueno, todo lo más adecuado vendrá a mí y me rodeará.
(Ahora di el favor especial que quieres conseguir de Dios Padre y de su corte celestial)
Gracias mi amado y poderoso Creador, por permitirme orar y pedir a ti, tu santa protección y compañía, sobre todo en los momentos más difíciles por los que pase en mi vida, te suplico me escuches y me concedas, si es tu santa voluntad, toda tu sabiduría y el amor de tu ser, por siempre.
ASÍ SEA
Si deseas que esta oración sea muy efectiva, para que no te afecten los males, las envidias o las magias vertidas sobre ti y las personas que quieres, repite esta oración junto a los rezos por nueve días, repitiéndola tres veces seguidas cada día. Si puedes el mejor momento para rezarla es por la noche, en un lugar tranquilo, cuando haya más silencio y calma. Por favor dedica unos minutos a la oración, no la hagas deprisa, así puedes conseguir una mayor concentración en la oración y poner más fuerza en tus peticiones.
Ahora te invitamos a hacer el Credo, un Padre Nuestro, tres Ave Marías y tres Glorias.
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