Queridos hermanos de Yo Creo En Dios, en esta nueva mañana te invitamos a hacer esta humilde oración, para llenar nuestra vida y nuestro espíritu con palabras de amor y de pensamientos positivos, pues si nuestros pensamientos y palabras se alinean con las mentiras del maligno y con lo que pasa en el mundo, entonces nuestra vida será vacía y sin sentido, llena de temores y de mucha ansiedad, pero si llenamos nuestra mente y nuestra boca con pensamientos de triunfo, de amor y de gloria, y entregamos nuestra existencia en las manos de nuestro divino Maestro Jesucristo, entonces seremos más que vencedores y recibiremos todas sus bendiciones.
Pidámosle a Dios que nos de la sabiduría para poder dominar nuestros miedos y nuestros pensamientos y que toda palabra que salga de nuestra boca sea de gozo y prosperidad, porque si encausamos y controlamos nuestro sentir, nuestro pensar, nuestro hablar y nuestro actuar, esto nos traerá, paz, alegría, serenidad, salud y mucho bienestar.
Te pedimos que no confesemos escases, enfermedad, queja, amargura, miedo o temor pues cada palabra que sale de nuestra boca se va haciendo realidad en nuestras vidas, y a veces terminamos donde no queremos llegar. En cambio, te proponemos que con mucho amor y con mucha fe, hagas esta oración las veces que consideres necesarias, para obtener la paz y el contacto directo con nuestro Creador, para que Dios te libre de todo miedo y temor que tengas, y te proporcione gozo y paz en tu vida.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Señor Jesús, hoy quiero escuchar tus palabras e inclinar mi oído a tus mandatos; los guardaré en medio de mi corazón porque son palabras de vida y de bendición. Tu palabra Señor, es la lámpara que guía mis pies y la luz que ilumina mi camino, por eso te pido que me des tu Espíritu Santo, para que tenga sabiduría en abundancia, así que muéstrame Señor tu misericordia y el camino a seguir, para tener siempre gozo y paz en mi vida.
Bendito Padre, tu palabra me da la sanidad que preciso y confesarla con mis labios me brinda sosiego y tranquilidad, pues en ocasiones mi ser se siente cansado, agotado y sin fuerzas para seguir adelante, todo lo veo nublado, el miedo y la ansiedad se apoderan de mí y la angustia me consume.
Por eso mi Señor Jesús, te pido que alejes de mí los miedos y los temores, las angustias y las preocupaciones y te pido que me ayudes a enfocarme en las cosas que realmente valen la pena, permíteme apoyarme en ti, que eres quien me puede liberar de cualquier atadura, eres tú quien me sana, me restaura, y me provees todo para vivir en plenitud y sin temores.
Divino Señor Jesús, hoy escucho tus palabras, háblame al corazón y abre mis oídos a tu voz, porque tu palabra es vida y medicina para todo mi ser. Dios de amor tú te llevas mis enfermedades, mis angustias y mis penas, tú me levantas y me conduces por fuentes tranquilas, por eso quiero depositar esto que me angustia en tus preciosas manos:
(En este instante entrégale a Dios todas tus ansiedades, fragilidades y todo aquello que te quita el sueño y no te permite avanzar).
Desde hoy en adelante declaro que tú eres mi Salvador y mi Pastor, mi cuidador, mi libertador y mi proveedor, declaro que soy templo del Espíritu Santo y por lo tanto permanezco en serenidad, con fuerza y en victoria, declaro que nada malo puede sucederme porque Dios está conmigo y me visto cada día con su armadura; declaro que la maldad, la tristeza o la preocupación no tienen poder sobre mí.
Yo soy hijo de Dios y propiedad de Dios, y por lo tanto el enemigo no tiene parte en mi vida, ni en mi familia, ni en mis finanzas, ni en mi salud, ni en mi mente, ni en mi cuerpo, ni en mis pensamientos. No me sobrevendrá mal alguno ni plaga tocará mi morada, pues a tus Ángeles enviarás para que me guarden, protegiéndome durante el día y durante la noche.
Señor, tú cuidas mi casa y mi familia de cualquier destrucción o enfermedad, porque tú guardas mis entradas y mis salidas, desde ahora y por siempre. Soy fuerte en ti mi Dios, me declaro sano, próspero y virtuoso, y la adversidad no podrá detener mi propósito, pues viviré y anunciaré las grandezas de mi Dios todopoderoso y el me protegerá de todo mal.
Señor Jesús, Dios de amor, tú eres la luz que alumbra a todos los que habitamos en este mundo, por eso danos amor, paz, y comunión con tu Espíritu Santo, ayúdanos a obedecer tus designios, y regálanos la fe para estar más cerca de ti.
Divino Maestro, desde este momento yo renuncio a la aflicción y me aferro a tu misericordia; lléname de tus bendiciones, concédeme abrirte mi corazón para que renueves mi existencia con paz y armonía, y dame sabiduría para caminar por tus sendas y que el bien siempre llegue a mí vida.
Amado redentor, haz de mí una persona nueva, llena de tu gracia, de gozo, de felicidad, de éxito y de victoria en todas las áreas de mi vida, pues hoy decido dejar atrás todos aquellos engaños del enemigo y todo pecado que no te agrade.
Que sea rota toda cadena de opresión y toda cadena de maldición e infortunio, en tu nombre Santo Señor Jesús, pues tú eres el Rey de Reyes y Señor de Señores. Por favor aumenta mi fe en ti y ayúdame a vivir conforme a tu voluntad, perdóname por las veces que me he alejado de ti y perdóname por todas las ofensas que te he hecho.
Amado Jesús de Nazaret, ayúdame a dejar atrás mi rebeldía, mi desobediencia y cualquier odio o rencor que pueda haber albergado en mi corazón. Por tu nombre santo, deseo vivir como un hijo tuyo en victoria y con la autoridad que me has conferido, con la confianza de la fe que mueve montañas, y proclamando tu gobierno sobre mi vida.
Desde hoy y por siempre te alabaré, porque has puesto bajo mis pies a mis enemigos. Señor enséñame a amarte, enséñame a alabarte, enséñame a ser una persona agradecida y a exaltar tu nombre que es Santo. Permíteme conocerte cada día más porque quiero servirte y que solo tú seas el dueño de mis pensamientos, sentimientos y acciones, de ahora en adelante y por siempre.
ASÍ SEA +
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