Queridos hermanos, que nuestro Padre Celestial los bendiga e ilumine en este nuevo día.
Muchos de nosotros hemos sido tentados en más de una ocasión, por las mieles y delicias del alcohol, sin darnos cuenta tal vez, de que en realidad es un monstruo, que se mete poco a poco en nuestras vidas y las va destruyendo, acaba con nuestras relaciones personales, con nuestros recursos económicos, no nos deja progresar, y puede llegar incluso a convertirnos en personas violentas e iracundas.
Por esta razón, en este nuevo día, queremos compartir contigo, esta milagrosa oración, para pedirle a nuestro amado Jesucristo, que con su gran poder nos sane de la enfermedad del alcoholismo, nos aleje de este vicio y no nos deje caer en sus garras.
Te invitamos a hacer esta oración con toda la fe de tu corazón, durante nueve dias seguidos o el tiempo que crees necesario, para que nuestro Salvador Jesucristo, nos de la templanza y la decisión, de poder cortar de una vez por todas con el alcohol, y así de su mano, poder retomar y reconstruir nuestras vidas.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Bendito y adorado Jesucristo, salvador de mi alma y de mi ser, en este nuevo día me acerco a ti, con gran humildad y arrepentimiento de todas mis culpas, de todos mis errores y de todos mis pecados, con la intención de pedir tu bendita ayuda, para que intervengas en mi vida de mane ra urgente, pues quiero dejar de lado el vicio del alcohol, que realmente me está perjudicando gravemente.
Padre Celestial Todopoderoso, hoy abro mis manos para orarte con fervor, pues ya estoy cansado de darle vueltas a esta situación en la que me encuentro, ya que muchas veces me he negado a mí mismo que estoy enfermo, que el alcohol se ha apoderado de mí, siempre he dicho que lo controlo, que soy muy resistente; pero la verdad es que mi cuerpo está destrozado y mi espíritu está en constante lucha, ya que no encuentro saciedad en la bebida, y siento que el deseo me posee y que pierdo mi vida poco a poco.
Mi buen Jesús, también te confieso, que solo quería ser un bebedor social, solo deseaba estar cerca de otras personas, para pasar un buen rato, momentos de alegría y de júbilo, pero este deseo se fue transformando en pesadilla, pues poco a poco me fue consumiendo, el alcohol se fue metiendo dentro de mí, haciéndome desearlo más y más, hasta incluso destruir las cosas o personas que amo.
Señor, el alcohol solo me ha dejado pequeños momentos de alegría o de júbilo, que creía que era lo ideal para mi vida, pues solo trabajaba para él, destinaba todas mis fuerzas para estar con él, pero al ver el tiempo pasar, al ver cómo ha destruido mi cuerpo, mi mente y lo que me rodea, hoy quiero dejarlo definitivamente; pero sé que no lograré, si tú no estás conmigo, apoyándome y guiándome en todo momento, para poder superarlo.
Por eso te pido Señor, que tomes mi vida y mi mente, que tomes el control de esta terrible enfermedad, la envíes lejos de mí y la destruyas definitivamente:
(Aprovecha este momento de silencio y reflexión, para arrojarte en los brazos de nuestro amado Jesús y pídele que con su gran poder te sane y ayude definitivamente)
Señor Jesús, mi adorado Creador y Salvador, yo creo en ti y con gran confianza, sé que con tu gran poder, me liberarás muy pronto de este sufrimiento por el que estoy pasando, sé que romperás las cadenas del vicio en mi vida y todo cambiará de manera positiva.
Señor lléname de voluntad para no ceder a la tentación que se me presenta en mi día a día, dame fortaleza para poder superar las barreras que se me presentarán y que me querrán hacer caer nuevamente, aleja a todas las personas que sigan queriéndome ver en la perdición, que no quieran que me levante y que reconstruya mi vida.
Santo Jesús, envíame por favor tu Espíritu Santo, para que me cubra a cada instante, para que junto con tu poder, limpie mi alma y mi cuerpo, me libere de una vez por todas, pues ya no quiero ser más aborrecido, así que te ruego, que me des la fuerza que necesito para seguir adelante.
Amado Salvador, mi buen y adorado Jesucristo, hacedor de maravillosos milagros, hoy me inclino ante tu presencia para recibir tu bendición, y que me ayudes a salir de la fosa que había cavado yo mismo.
Señor te pido de manera encarecida, que me des todas las fuerzas necesarias para poder combatir esta enfermedad de ahora en adelante, por favor no me dejes solo, no me abandones en estas horas oscuras, ya que no quiero ser prisionero de la bebida, pues solo deseo encontrar la paz y la felicidad.
Jesús, Dios y salvador, te doy las gracias por escucharme, te pido que restaures mi vida, y que me ayudes a ser un buen cristiano desde ahora y por siempre.
ASÍ SEA +
Querido hermano, ahora con mucha entrega y arrepentimiento por nuestra sanación, acompañemos nuestra oración haciendo el Credo, un Padre Nuestro, tres Ave Marías y tres Glorias. Muchos de nosotros conocemos o tenemos cerca, a una persona que lamentablemente se ha dejado llevar por el alcohol, que ha puesto todos sus afectos en el licor, y este lo ha logrado dominar, hundiéndolo sin compasión en un foso de sufrimiento, pues por culpa de este vicio, esta persona no logra progresar, no tiene buenas relaciones con los demás, deja sus responsabilidades de lado, mantiene endeudado, por lo general nunca tiene dinero y lo peor de todo, en ocasiones se vuelve una persona violenta.
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