Queridos hermanos, todos en muchos momentos, por diferentes circunstancias de la vida, nos llenamos de miedos y temores que suelen destruir nuestra vida, pues no nos permiten avanzar en el amor, en nuestra vida profesional, no conseguimos trabajo y en definitiva nuestra autoestima y amor propio se ven afectados, llevando al traste nuestra vida y nuestras relaciones.
Por esa razón y para liberarnos del miedo y poder quitar todos nuestros temores, hoy les traemos esta poderosa oración a nuestro amado Jesucristo, para que nos de las fuerzas necesarias, para poder enfrentar cualquier prueba que estemos viviendo, y la podamos vencer y superar.
Hermanos, Dios nos ha dado además a cada uno de nosotros, talentos y capacidades especiales para salir adelante, y con su divina ayuda, de seguro podremos sacar adelante cualquier problema o dificultad que tengamos.
Te invitamos a hacer esta oración durante nueve días seguidos, o cada vez que necesites de la preciosa ayuda de nuestro Creador, para aferrarnos de su mano y poder tomar las riendas de nuestra vida, confiando en su divino amor.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Señor Jesús, sé luz en mi mente, paz en mi corazón, sabiduría en mis decisiones y amor en mis relaciones personales. Yo te necesito, sólo tú eres capaz de calmar mis penas, sólo en ti tengo depositada mi esperanza; sólo en ti podré encontrar un lugar donde protegerme y así no darle lugar al miedo y a las distintas formas del mal que día a día me acechan.
Mi Creador, son muchos los miedos que me atacan a diario, por eso hoy reconozco ante ti, que estoy plagado de desdichas, y acudo a ti como mi Dios, pero también como mi amigo y mi hermano, para que me llenes de tu alegría y de tu gozo, y renueves esa fuerza esperanzadora que levanta del suelo a todos quienes confiados en ti, buscan de tu ayuda.
Señor mío, tú conoces todos los vacíos que hay en mi ser, y sabes que ellos sólo pueden ser llenados por tu gracia y tu presencia. Mis miedos, mis preocupaciones, mis dolores, mis confusiones, sólo pueden encontrar soluciones y sanación en ti Señor, y hoy sé, que con tu ayuda podré superar todos esos miedos que no me han dejado avanzar.
Señor, tú eres poderoso, grande y estás lleno de amor, tú haces de lo imposible, lo posible, por eso hoy te pido con todo mi ser, que por favor me ayudes a resolver y a superar esto que tanto hoy me atormenta y que me llena de miedo y de temor:
(En este momento cuéntale a nuestro amado Jesús tus temores y problemas y pídele que te ayude a superarlos)
Bendito Jesús, muéveme con tu Santo Espíritu, tú me acompañas y me das valor para enfrentar esas circunstancias que me llenan de miedo y que ponen a temblar mis rodillas. Pero yo desde este momento, me mantengo fiel a ti, porque tengo la seguridad de que no me vas a fallar, así que toma mi vida Señor, toma mi mente y mi corazón y hazme un fiel discípulo de tu amor.
Mi Salvador, tú me das la certeza de una vida tranquila y llena de gozo, cuando en muchas veces en tu Evangelio, dices “no temas” y yo decido desde hoy no temer más, pues quien cree en ti jamás quedará defraudado y no habrá temor alguno que haga tambalear su fe.
Amado Jesús, quiero dejar que te acerques siempre a mí, vivir en comunión contigo toda mi vida, que mis faltas jamás me separen de tu amor, porque siempre busco tu perdón. Todo miedo que hay dentro de mí se desvanece cuando te acepto y mi boca dice confiada: “Creo en ti, Señor mío”. Por favor, toca mi corazón, sánalo, libéralo del miedo y de las situaciones adversas, que lo hacen poner inquieto, tú eres mi fortaleza y tengo la certeza de que tu amor y tu misericordia no se apartan de mi espíritu.
Señor, confío en tu promesa fiel, confío en tu palabra que me conforta, por eso hoy acepto en mi vida las mismas palabras de esperanza que le dijiste a Josué: “No tengas miedo ni te acobardes, porque yo, tu Señor y Dios, estaré contigo dondequiera que vayas.”
Sopla Señor mío, sopla fuerte, sopla las bendiciones sobre mí ser, que traen consigo tu Espíritu Santo para que me ayudes a creer, y a dar un verdadero testimonio de tu amor al mundo, sin temores y sin miedos. Muéveme Jesús mío, con tu Santo Espíritu, que me acompañe siempre en todos mis retos, y en aquellos momentos de desolación y de flaqueza, que a veces siento que me tumban al piso y que me hacen incapaz de continuar la lucha por ser cada día mejor.
Señor, dame la fuerza y tu poder para vencer los miedos y estar libre de angustias, guía mi corazón y mi mente con el Espíritu Santo, esa presencia poderosa contenida en tus tres divinas personas que ilumina nuestras vidas y nos hace ser personas decididas y valientes en la fe.
Te amo Jesús, y confío que desde este momento, tú estás rompiendo con todas esas cadenas que me han atado a la desesperanza y a la desdicha; y aunque aún camine por sendas oscuras, ya no vacilaré ni temeré, porque tu fuerza y tu poder están conmigo y harán que mi vida cambie de manera positiva hoy y por siempre.
AMÉN +
¡Confía en el Señor tu Dios! Ya deja atrás esos miedos y atrévete con valentía a luchar contra esos sentimientos que quieren echarte por tierra y hacerte sentir que no vales nada. ¡No te dejes! ¡ERES UN HIJO DE DIOS! Todos los esfuerzos que hagas en el poderoso nombre de Jesús tendrán sus frutos muy pronto. Hermanos, ahora para que reforcemos nuestra oración, y nos consagremos más a la gloria de nuestro Creador, hagamos el Credo, un Padre Nuestro, un Ave María y un Gloria.
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