Queridos amigos de YO CREO EN DIOS, cuando una persona fallece por lo general los más afectados con la partida de este ser querido, somos los familiares, porque no nos resignamos a que esa persona ya no está, ni a aceptar lo que sucedió, por eso es importante que descansemos en el Señor, porque él, en su infinita misericordia, nos ayudará a llevar la situación de una mejor manera y nos dará la sabiduría para salir de la tristeza y la depresión que esto nos causa.

Naturalmente tendremos que tener un tiempo para descargar el dolor que su partida nos produce, sin embargo, tengamos en cuenta que a una persona que está a punto de irse, no le gustaría saber que ha dejado a su familia en una profunda tristeza, por lo que tenemos que sobreponernos y tratar de superar este dolor.

Es por este motivo que en esta ocasión te traemos esta poderosa oración para ponernos en la presencia de Dios y pedirle su ayuda para salir de este sufrimiento. Confiemos en Dios que nunca nos defrauda, porque él nos ama infinitamente, no nos dejará solos en estos momentos tan difíciles, en los cuales requerimos de su presencia.

Pidamos al señor Jesús con insistencia y él nos dará la paz que anhela nuestro corazón y atenderá nuestra oración para darnos lo que él sabe que necesitamos.

Te invitamos a hacer esta oración durante nueve días seguidos, con mucha fe, dedicación y en forma pausada y verás los resultados.

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.

Señor, solo tú eres el dueño de la vida. Nos concedes la gracia de nacer, siempre con un propósito, y del mismo modo nos llamas a tu reino de luz cuando consideras que nuestra misión en la tierra ya está cumplida, no antes ni después.

Hoy me presento ante ti con humildad profunda y seguro que mis súplicas serán escuchadas, para pedir por el eterno descanso del alma de… (di el nombre del difunto) a quien has llamado a tu presencia.

Padre celestial, por favor permite el descanso en el paraíso del alma de mi ser querido, quien ya abandonó este plano terrenal y ha emprendido un viaje al cielo prometido. Tú, que eres un Dios de amor y de perdón, por favor borra las faltas que pudo haber cometido y concédele la gracia de la vida eterna.

Te pido mi buen señor, por aquellos que, como yo, lloramos la partida de este ser querido. A ellos y a mí, abrázanos con tu amor infinito y danos la fuerza y la sabiduría para mantener la calma en estos difíciles momentos, y para comprender que la mejor manera de honrar a quien ya ha partido es recordarlo con amor y valentía, para que podamos reponernos de la tristeza y continuemos adelante con tu compañía, haciendo tu santa voluntad.

(Ahora desde tu corazón realiza una oración al Señor por el descanso eterno de tu ser querido)

Oh Señor, elevo a ti esta oración, y te agradezco por escuchar mi clamor, que con tanto fervor exalto hoy. Padre Santo, te pido para que, en un acto de misericordia, le brindes el consuelo a mi alma y a mi corazón y seas tú guiando los pasos y cada una de las decisiones y acciones que tome en adelante en mi vida.

Señor Jesús, tú eres mi único consuelo en las horas de dolor, tú, Señor, que has llorado sobre el sepulcro de tu amigo Lázaro; compadécete también de mis lágrimas. Míralas, Señor, cómo sangre del alma adolorida, por la pérdida de mi ser querido.

Señor, mira mi llanto, como tributo sentido que te ofrezco por su alma, para que lo purifiques con tu preciosísima sangre y lo lleves al cielo por el amor que siempre nos has tenido.

Míralas, Señor, para que nos des fortaleza, paciencia, sabiduría y esperanza, por tu bondad, a mí y a mi familia en esta difícil prueba por la que hoy estamos pasando.

Míralas, oh dulce, oh piadosísimo Jesús mío, y por ellas concédenos que los que aquí en la tierra hemos vivido atados con los fortísimos lazos de tu amor, ahora lloramos la ausencia momentánea de este ser querido, para que nos concedas poder reunirnos de nuevo junto a Ti en el Cielo.

ASÍ SEA +

Ahora haz el Credo, tres Padrenuestros, tres Avemarías y tres Glorias.

Reflexión

Si necesitas llorar para expresar tu dolor hazlo, es duro aceptar la partida de un ser querido que nos ha dejado, pero es momento de recordar las cosas lindas vividas con esa persona y lo que aprendiste de ella, quien ahora descansa y nos acompaña desde el cielo. Siempre contaras con su amor y sus eternos buenos deseos para ti, En este momento debes dejarlo partir y que llene con su presencia otro espacio en el universo.

Es difícil desprenderse de un ser tan maravilloso, como el que ha partido, sin duda esa persona te hará mucha falta, pero su rol en este mundo se ha terminado y ahora debe incorporarse a la vida eterna. Es un momento de mucha tristeza, el cual solo podemos superar con la ayuda de DIOS que todo lo puede.

Ahora debes afrontar una realidad que no esperabas y es un paso que requiere de fortaleza. Siempre recordaras lo bueno que esta persona hizo por ti y lo mejor que pudo hacer por todas las personas que le conocieron, envíale un fuerte abrazo en la distancia y piensa que morir es como estar un tiempo afuera, pero que su esencia se quedará en tu mente y en tu corazón para siempre.